Algunas veces. Cuando
calmo mi mente. Cuando
desconecto mis expectativas. Cuando
me dejo ser yo. Te siento
aleteándome en tu corazón. Mientras
intentas borrarme de tu pensar. Cuando
intentas poner todo en su lugar.
Recuerda tan solo. Cuando
las abejas son molestadas. Cuando
uno se entromete en su aleteo
se ponen bravas,
pican e inevitablemente
mueren.
Daniela Flores