Sí, el mar se revuelve todo y arroja algas,
sí, los botones no florecen,
sí, las hojas se marchitan;
sí, todo eso sucede y es perfecto.
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¿De dónde sacamos entonces,
que la vida debería
verse siempre verde?
·
La flor sigue siendo perfecta
con sus flores marchitas
y sus botones aún sin florecer,
por que está viva.
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Estar vivo es mudar piel,
quedarse sin nada
para que vuelva a crecer,
es experimentar
que hojas de nuestra existencia
se sequen para que renazcan verdes.
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Y es que la orilla sigue recibiendo al mar,
sin importar que le entregue;
confían en que cada uno
hará lo que tenga que hacer.
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¿De dónde viene la idea
que el proceso de crecer
tiene que estar libre de fracasos?
·
Que el número de errores
es limitado a la infancia,
que es malo cometerlos,
que es mejor ocultarlos;
cuando son abono para nuevas semillas.
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¿De dónde sacamos la idea
de ser tan imperfectos?
·
En realidad,
somos una rosa más de este jardín
que llamamos vida.
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¿Quién nos dijo que sentir era una debilidad,
algo que nos deja expuestos?
·
Que el sentir debe
consumirse a gotas y en privado;
sería como si el cielo
se apenará por tronar.
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¿De dónde sacamos
la idea que envejecer
es algo a evitar?,
cuándo todos nos hemos apoyado
en un tronco frondoso
o disfrutado de un camino
que se ha echo solo de andar.
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Así que cuando te cuentes de nuevo tu historia,
compárala con las algas que arroja el mar,
una simple forma de equilibrar
o con las flores marchitas que se caen,
para dejar espacio a las que ya vienen detrás.
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Pregúntale al viento
cuantos remolinos hay en su historia,
pregúntale al fuego
cuántas vidas a tomado
y también cuántos caminos ha creado.
·
No te olvides que tu como ellos,
eres parte de la misma creación;
una vida siempre en proceso de evolución.
Daniela Flores
👏👏👏
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