Mi mente insiste en correr a tu recuerdo cada mañana
antes de que note que ya no estás presente
tendré que educarla otra vez
tener la conversación seria
informarle como es la situación actual, la real.
Temo volver a llorar a mitad del semáforo cuando se pone en rojo
cuando se cuela el recuerdo de tus palabras
tener que sonreír ante las miradas que extrañadas
que me ven secándome las lágrimas
Temo perder de nuevo la chispa en mi mirada
y que el hueco en la panza carcoma de nuevo
que me recuerde constantemente
que fuiste tú quién eligió su partida
Temo que mi mente se vuelva
una calle desierta plagada de carteles
que dicen “se busca” con tu foto
que no se desgasta en ellos.
También están las lágrimas desatinadas
que me traicionan a mitad de la hoja de cálculo
que no logro cuadrar
así como lo nuestro
Tal vez,
dejé pasar algún concepto
tal vez,
solo soy una mala administradora
y olvidé la regla de oro
que los centavos también afectan el cálculo final.
Daniela Flores
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...