Cuando estaba enamorada
mi cielo no era rosa
sólo cuando visitaba la luna
nadie puede negarme que era rosa.
Amaba con los pies en el suelo
quise correr, ganarle al tiempo
desgasté mis suelas
queriendo cambiar lo que ya era.
Cuando estaba enamorada
mi niña se sintió aceptada
encontré el consuelo que necesitaba
un maravilloso respiro,
para un camino que iniciaba.
Un renacimiento que la vida me brindaba
una oportunidad para amarme
romper con las cadenas del apego
a las que yo sola me ataba.
Abrir los ojos, dejar de buscar en el otro
el valor que yo misma me negaba.
Cuando estaba enamorada
recordé una libertad olvidada
Cuando estaba enamorada. Me sentí tan plena
que busqué la forma de seguir enamorada
descubrí el romance de una vida entera
con la misma mujer que tenía olvidada.
Daniela Flores